Hoy, vamos a embarcarnos en una emocionante aventura culinaria, explorando el arte de hacer mermelada casera con una variedad de frutas frescas y deliciosas. Entre las estrellas de nuestra creación, se encuentra la exótica y jugosa maracuyá, una fruta tropical que agrega un toque de pasión y frescura a nuestra mermelada. Acompáñanos mientras te guiamos a través del proceso de hacer mermelada casera y descubrimos cómo puedes transformar simples frutas en una delicia que cautivará tu paladar.
Preparando las Frutas: Maracuyá y Más
Antes de comenzar con el proceso de hacer mermelada, es esencial seleccionar frutas frescas y maduras. En esta receta, vamos a destacar la maracuyá, una fruta llena de sabor tropical y antioxidantes. Además de maracuyá, puedes experimentar con una variedad de frutas como fresas jugosas, duraznos dulces, o incluso mangos exuberantes para añadir un toque especial a tu mermelada.
A nosotros nos sobró una enorme cantidad de Maracuyá este año y para no perder la cosecha, decidimos hacer mermelada de Maracuyá. Es muy fácil de hacer. También para no perder el resto de la cosecha, todo la pulpa de las Maracuyás lo congelamos en bolsas para congelación para ir sacando poco a poco cuando queremos.
El Proceso de Hacer Mermelada: Paso a Paso
Paso 1: Preparación de las Frutas Comienza pelando y deshuesando las frutas según sea necesario. Para el maracuyá, corta la fruta por la mitad y saca la pulpa con una cuchara. Se puede dejar la semillas de momento que mas adelante lo colamos con un colador.
Paso 2: Cocinar las Frutas En una cazuela grande, combina las frutas preparadas con azúcar y agua. Cocina a fuego medio-bajo, revolviendo ocasionalmente para evitar que se pegue. Las frutas se cocinarán lentamente y liberarán sus jugos naturales, creando una mezcla espesa y fragante.
Paso 3: La Prueba del espesor Para asegurarte de que tu mermelada tenga la consistencia adecuada, realiza la prueba. Coloca una pequeña cantidad de la mezcla en un plato frío y deja que se enfríe durante unos minutos. Pasa el dedo por el centro; si la mermelada se arruga y tiene una textura gelatinosa, está lista para envasar.
Paso 4: Envasado y Almacenamiento Vierte la mermelada caliente en frascos esterilizados y sella bien. Voltea los frascos durante unos minutos para asegurar un sellado hermético. Deja que los frascos se enfríen completamente antes de almacenarlos en un lugar fresco y oscuro. Tu mermelada casera estará lista para disfrutar en tostadas, panecillos o como acompañamiento para postres deliciosos.
La Magia de la Maracuyá
La maracuyá, que también es conocida como parchita o fruta de la pasión, con su sabor agridulce y aroma embriagador, se convierte en el héroe de nuestra mermelada casera. Esta fruta no solo añade un toque tropical, sino que también está llena de nutrientes esenciales y beneficios para la salud.
En resumen, hacer mermelada casera es una experiencia gratificante y creativa que permite a los amantes de la cocina explorar una variedad de sabores. Con el maracuyá como estrella, nuestra mermelada casera no solo deleitará tus papilas gustativas, sino que también te permitirá sumergirte en el mundo encantador de las frutas frescas y sabores naturales. Así que, ¿para qué esperar? ¡Prepárate para un festín de sabor con esta mermelada casera de maracuyá y otras frutas deliciosas! ¡A disfrutar!
Receta de mermelada de Maracuyá
400gr Maracuyá (la pulpa con sus semillas)
300gr Azúcar
100ml Agua
Agregar todo en una cazuela, mezclar todo bien.
Cocinar al fuego medio-bajo para 30 minutos
Colar la mermelada y retirar todas las semillas
Vuelve la mermelada al fuego lento 10 minutos mas y listo!
Envasar en botes de cristal y a disfrutar!!
Se puede usar la mitad de los ingredientes si no tienes esa cantidad de pulpa de maracuyá