Las verduras son una parte esencial de una alimentación equilibrada y saludable. Son ricas en vitaminas, minerales y antioxidantes que promueven la salud y previenen enfermedades. Sin embargo, para que estas joyas verdes crezcan fuertes y llenas de nutrientes, es fundamental proporcionarles el cuidado adecuado, y uno de los elementos más cruciales en este proceso es el agua.
Las verduras, al igual que cualquier otro ser vivo, necesitan agua para sobrevivir y prosperar. El agua es esencial para varias funciones vitales en las plantas, incluido el transporte de nutrientes y minerales desde las raíces hasta las hojas, la fotosíntesis y la regulación de la temperatura. Cuando las plantas no reciben suficiente agua, pueden experimentar una serie de problemas que afectan su salud y rendimiento. Una de las consecuencias más evidentes de la falta de agua en las verduras es la falta del crecimiento. Cuando las plantas no tienen suficiente agua, su capacidad para absorber nutrientes se ve comprometida, lo que limita su desarrollo
Como pueden ver en las siguientes fotos, las calabazas que recogimos hoy faltó mucha agua y no se desarrollaron bien. A lo mejor se pueden aprovechar pero la verdad es que es una pena verlas así.
Las próximas calabazas saldrán mejor porque cuando las plantemos las marcaremos donde están plantadas. Las que se ven en las fotos son del año pasado y al no saber donde estaban plantadas era difícil regarlas. Las calabazas tienen muchísimos tallos que se enredan.